...:::Después de aquel día...:::...

Esto lo leí esta tarde en la Revista Oh! del Listín Diario, ... y se me pareció tanto a mí, que lo quise compartir. La Vida en Tacones por Coh!rina... de la edición del sábado 16 de agosto 2008.

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Luego de aquel tormentoso e inquietante encuentro “cercano” con Pasajero, me quedé pensando en cuáles eran los elementos que habían hecho que este misterioso caballero se fijara en mí. ¿Cuáles son las cualidades que más atraen a un hombre de una mujer? Entonces recordé a mi amiga Marianna, quien tenía solo meses de casada y por lo que sabía, ella se esmeraba en tratar de no cometer error alguno con su esposo: hacerlo sentir cómodo, feliz y completo a su lado. Me di cuenta de que muchas de nosotras cuando estamos enamoradas nos ponemos “locas” tratando de no perder ese encanto que atrajo a nuestra pareja hacia nosotras. Honestamente pienso que el encanto de nosotras es nunca dejar de ser una misma, porque en el trayecto se hacen algunos cambios que, como resultado, solo dejan a una como otra persona con adaptaciones que no teníamos, y de todas formas aún siempre habrá críticas.

Compañeras, amigas, lectoras: ¿no creen que si están con nosotras es porque les gustamos tal cual somos, tal como nos conocieron? Bueno ¿y entonces cuál es el afán de adaptar actitudes que nunca estuvieron? Por supuesto que estoy conciente de que hay situaciones que ameritan que una actúe de determinada manera conociendo ya a nuestras parejas y cómo reaccionan pero también sé que no se puede perder la autenticidad, eso que nos hace y nos hizo únicas y distinguidas entre las demás. Es posible que se trate de una broma pero en el caso de Pasajero si ciertamente, como todo parece indicar, yo le agrado es porque me acepta con todo y las frecuencias que se me meten de vez en cuando, o acepta mis actitudes y posiciones, por eso me siento muy triste cuando escucho de casos en los que las parejas intentan modificar con gran empeño esas cualidades únicas en sus esposas y esposos, novi@s, etc. Todo se trata de aceptación con dosis de consejos, así una tiene la opción de tomar con un gotero un poquito de lo que agrade al dueñ@ de nuestros corazones sin cambiar nada, sino más bien mejorar.

A mí, les seré sincera, me han tratado de cambiar algunas cosas y ahí reside el error: dame un consejo, permíteme dosificar lo que me dices y aplicarlo en mí sin cambiar abismalmente. Esa es la clave del éxito. Pensarán ustedes que no soy la persona más indicada para hablar de éxitos en las relaciones porque estoy solita, pero les diré todo lo contrario: sí soy exitosa, porque en el momento en que me di cuenta de que dejaría de ser yo misma para parecerme a lo que esa persona quería que fuera, decidí actuar con inteligencia, llevar al diálogo las cosas y si definitivamente esa persona quería hacer de mí alguien parecida a él, pues dejaba atrás esa relación tan poco saludable.

Para el gusto lo colores, como reza una frase que tod@s conocemos y estoy segura que a cada quien le llega el color que más combine con nuestra personalidad, cualidades, debilidades y fortalezas. ¿Pasajero será el color que he estado esperando? Le escribiré un email. Basta de rodeos: lo citaré para conocernos.